miércoles, 25 de marzo de 2009

Veneno

Cuando hayas vertido todo tu veneno
él acongojado se alejará sin voltear la vista
mirarás como se aleja, paso a paso
quedarás sin duda laxa y extenuada
con la boca amarga y el alma complacida

Tu cama será una cárcel eterna
tus sabanas serán un lastre tullido
poco quedará del amor en ti
morirás odiando haber odiado tanto
tus sueños serán pesadillas

Tu despertar un continuo sufrimiento
en el largo camino que te espera
porque no morirás pronto
esperarás el retorno del amor
será muy tarde, tu odio mezquino lo enterró.

7 comentarios:

Bibiana Poveda dijo...

Terrible presagio el que expresa este doloroso poema. El que odia, sufre demasiado, aunque nos parezca otra cosa.
Un saludo muy cordial!

Leni dijo...

"morirás odiando haber odiado tanto"

Después de esto solo queda el veneno vertido y el dolor del amor.
Desgarradores versos.

Un abrazo

Marisol Cragg de Mark dijo...

Odiar sólo envenena el corazón.
Recibe un cordial saludo desde Berlín.

Alejandra Menassa dijo...

Odio mortal, bilis que se vuelve hacia el que la destila.
Bien expresado.
Un saludo

Alonso de Molina dijo...

Bien venido Angel Arturo, deseo que te encuentres aquí como en tu propia casa

un abrazo para ti poeta

.

Laura Gómez Recas dijo...

Es muy difícil escribir sobre el odio. Hay un cierto resentimiento sobrevolando el poema. Es intenso.

Un abrazo
Laura

JR dijo...

la contrapoesía al poder...el odio define el amor, asi como el imán define sus polaridades, sino miren la aurora boreal...electromagnetismo puro, también el Sol no odia,jajaja.

genial.