miércoles, 11 de febrero de 2009

Un abismo ocultándose en la piel



Me ocurre a veces: Estoy mordiendo la manzana.


Mientras yace mi ánimo con los pies en el suelo
mastico el sexo componiendo formas urgentes,
exiguas concesiones luciéndose en los atrios
de la carne y sus formas


¡Lo he visto tantas veces prendido en sus hogueras...

Urdiéndose en las nubes de mi inflamado apremio...

Resbalando en las uvas del pretendido vientre!



Probarlo
es iniciar un viaje a la adicción,
contender con los cuerpos desafiando al deseo,
huir sin juicio hacia dentro de la razón



Ni una caricia previa…

Ni un lunar en la boca

Tan siquiera un olor a sándalo

Sólo el instante mágico de la penetración
la inmersión en la vida

y los labios mordidos con fruición
Alguna hosca mirada
alguna hábil meseta

alguna reticente brecha


Ahí queda el espacio embravecido

y bajo la apagada urgencia

un abismo ocultándose en la piel



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Adicto a Lyric Storm
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©Alonso de Molina

8 comentarios:

Alejandra Menassa dijo...

La piel es un abismo de caricias y de besos pedidos como galeones hundidos en medio de la bruma con sus tesoros escondidos, me encantó tu poema, qué sensual.
Lo primero que pensé fue: Guau, pero me pareció demasiado vulgar para decirlo en primera instancia.
Te saludo amigo poeta, saludo la voluptuosidad de tu vibrante poesía

Alonso de Molina dijo...

que cosas dices Alejandra,
guauuu. Me encanta.

abrazo entrañable

Lila Manrique dijo...

Sensualísimo diría yo, me encanta, un abrazo querido amigo.

Leni dijo...

Algunas veces prevalece el instinto.
Te dejas llevar por el .
Te ejas cegar por el.
Cuando llegas a la cima ,te preguntas como has llegado.
¿Has gozado de esa escalada?.

Ufff...(eso lo dice el gato)
Muy bonito.Y con mucho detrás.

Beso

Paula Malugani dijo...

La manzana de la poesía fue perfumada para tus labios de poeta; y la tentación de esos abismos de la piel, un rincón donde dejar tu pluma latiendo en libertad. Hermoso poema.

Alonso de Molina dijo...

gracias Lila por venir, por tu comprénsión. Un beso compañera.

Alonso de Molina dijo...

Leni chiquilla, hay instintos que ni metiendote entero en un barreño lleno de cubitos puedes reprimir, ahora bien ¿hay que reprimir los instintos?

abrazo compañera

Alonso de Molina dijo...

Paula que comprensiva eres, que buenos los ojos que me miran, gracias por venir

un abrazo para ti colega