Cuadro: El jardín de las delicias, El Bosco
-Mundo:
El hombre inventó el holocausto,
El hombre inventó el holocausto,
porque no soportaba morir solo.
Dijo: sobrevendrán tectónicos movimientos
Dijo: sobrevendrán tectónicos movimientos
que abrirán en mi vientre hambrientas
bocas que sólo comen hombres distraídos
en el acto de amar desesperadamente
en el acto de amar desesperadamente
su propio corazón.
Dijo: La lava abandonará los volcanes,
Dijo: La lava abandonará los volcanes,
y lamerá, roja lengua de fuego
mi telúrico vientre.
De su fecundo recuerdo,
mi telúrico vientre.
De su fecundo recuerdo,
me nacerán vegetales hijos por doquier,
habrá, no obstante, algunas inevitables pérdidas humanas.
Dijo: Huracanes con sugerentes
Dijo: Huracanes con sugerentes
nombres de mujer arremeterán
contra mis masculinas costas del Pacífico,
del Índico y Atlántico,
y provocarán en su seno atroces marenoches,
desconsolado llanto de todo lo que cae,
y provocarán en su seno atroces marenoches,
desconsolado llanto de todo lo que cae,
levantarán a las casas por los precarios pies,
y a los hombres por suhombría toda, desvaneciéndose.
-Muerte:
Son capaces de todo por burlarme,
-Muerte:
Son capaces de todo por burlarme,
y yo los amo en su insistencia,
en su perseverancia.
¿No se darán cuenta de las veces que he salvado su vida?
¿No tienen ojos huecos para ver
¿No se darán cuenta de las veces que he salvado su vida?
¿No tienen ojos huecos para ver
que he detenido la ansiedad
de tus bocas con un beso?,
apaciguado la pasión de tus fuegos
apaciguado la pasión de tus fuegos
con el sacrificio de mi nombre,
desviado el curso de tus vientos femeninos
con mi cuerpo alzándose como un escudo heroico
-Mundo:
Construyen día a día su final,
-Mundo:
Construyen día a día su final,
están llenos de robóticas esperanzas,
de fallidos intentos de romper sus cadenas,
de ridículos actos de desesperación.
Pero yo también los amo,
Pero yo también los amo,
son nuestros hijos,
y si la sangre valiera algo...los amaría como una madre
ama a sus hijos.
Dijeron :
Ya nunca más un hombre se enamorará de una mujer,
Dijeron :
Ya nunca más un hombre se enamorará de una mujer,
ya nadie hará el amor.
Nadie querrá ser el padre de nada,
y las madres abrazarán a sus hijos hasta exterminarlos.
Ningún hombre escribirá
Ningún hombre escribirá
nada que le sirva a otro hombre,
es decir: ningún hombre escribirá.
¡Cómo se equivocaron!
-Muerte y Mundo al unísono:
No se puede acabar con los hombres,
¡Cómo se equivocaron!
-Muerte y Mundo al unísono:
No se puede acabar con los hombres,
han aprendido a escribir,
han aprendido a poner sus manos
en el mundo.
No se puede acabar con los hombres,
No se puede acabar con los hombres,
han aprendido a taracear papeles
con sus sueños, sus quimeras
y sus cavilaciones de altos vuelos.
Amaron una vez,
Amaron una vez,
ya no podrán dejar de amar.
Y algunos no le temen ni a la muerte.
Y algunos no le temen ni a la muerte.
Alejandra Menassa, del libro La muerte en casa. Ed Grupo Cero
www.alejandramenassa.blogspot.com
6 comentarios:
El talento que posees para dar vida
a tus escritos, es especial, maravilloso.
Realmente, me encantó lo que he leído. Posees fuerza poética, y un sentido especial para crear.
Felicidades, y un abrazo grande.
Gracias Lila.
Nos seguimos leyendo por aquí.
Un abrazo.
"El hombre inventó el holocausto,
porque no soportaba morir solo"
El inicio ya prevé un poema pleno de desoladas imágenes, áridas escenas donde abiertamente se expresa que la propia dejadez del hombre es el origen de su futuro vacilante e impreciso.
Un poema bien distinto a los anteriores que te hemos leído; en esta ocasión la muerte y el mundo aúnan su mensaje en pos de la esperanza
continúo aplaudiendo tu obra
un fuerte abrazo para ti
.
Gracias Alonso: si algún día "mi obra" (término que me parece demasiado grande con sólo 5 libros publicados de poesía) reclama un comentarista, serás tu sin dudarlo. Un abrazo y gracias por acogerme y leerme.
cinco libros enteritos tu sola? Tu puedes Alejadra. Aún no me atrevo a ser guerrillero poético, estoy en siete u ocho antologías, amparado, protegido por otros tantos amigos, un libro de poemas para mí solo como que se me antoja una gran responsabilidad y no es falsa modestia, pero no me siento preparado. Te envidio mucho, mucho... conste que envidia sana y además llena de admiración por tu obra, por lo que te vengo leyendo. Y sin dudarlo, por supuesto que será un honor, si un día lo precisas, comentar tu obra, lo haré con gusto y te estaré agradecido.
Un fuerte abrazo
Gracias mil Alonso. Un abrazo, seguro que algún día...
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