(Texto 2 de 3)
Preferentemente en el cielo
(o en una cala del Arrecife de las Sirenas)
establecemos un ambiente de complicidad
No hacen falta Straus ni Leonard Cohen,
tampoco Kítaro,
el mar ya es música
servimos la bebida, sorbemos la pajita
sonríe a tu pareja
deja que tu pareja te sonría a ti
volvemos a sorber la pajita
mira a tu pareja con la inocencia
de un niñ@ de cinco años
vuelve a sorber la pajita
toma a tu pareja de la mano
y ambos
dirigís la vista al mar
dejaros arrullar por sus sonidos
vuelve a sorber la pajita,
esta vez tu en la de ella
ella en la tuya
A partir de aquí
El Mojito hará el resto
Déjaos llevar
y no os preocupeis
por la explosión de luz
solo las sirenas darán fe
.
Reposición del texto en atención a Laura Gómez Recas, entrañable poeta y amiga. He automatizado las entradas para las 19:00, 21:00 y 23:00 de hoy sábado, noche de luna llena.
4 comentarios:
Estupendo... Pero me falta el mar...
¿Será importante?
:)
Me ha gustado mucho el mojito, y me doy cuenta de cada cual puede hacerse su coctel. Tu poema me animó a bajar a la playa y buscar un rincón frente al sol y a la nada. Creo que me está haciendo efecto el mojito.
Saludos
Bonita fórmula para tomar un mojito en pareja. De cualquier forma, hasta tomar un vaso de agua con alguien especial, puede ser todo un bonito ritual.
Un saludo.
AbuMariCruz :)
Mari CRuz, entré en tu blog, lo miré con la lengua relamiendome los labios y sin poder contenerme salí con urgencia a buscar una tienda, finalmente me tuve que conformar con un croasan, eso sí, rebosante de chocolate. Gracias por tu amable comentario, es un placer saludarte, y siento la demora, se me pasó con el ajetreo del verano y los mojitos en la playa, jejej
Fuerte abrazo
adm
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