domingo, 24 de mayo de 2009

-¿Con qué sueñas, Blanca?




-¿Con qué sueñas, Blanca?*
-Con un velero. No quisiera
morirme sin ver la constelación de Orión desde alta mar, y desde cubierta





Acogemos tu entrega con desánimo;
nadie admite que cierres los ojos
y engendres cicatrices en los versos.

¿Pero cómo podrías
mantener alejados los incendios?.
Que más podrías tú que soportar la tormenta
si las nubes se unieron en tus ojos
mordiendo amaneceres como pájaros.

En el aire caliente de tus signos
permanecen pulgares hilando los teclados,
una red de palabras tan humanas
que tiñen emociones y adjetivos;

allá donde tu cuerpo se asienta con la tierra,
tus letras por sí solas se acrecientan.




*entrevista a Blanca Sandino hace justo un año

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©Alonso de Molina
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"siete mil veces he muerto
y estoy risueño como en el primer día"
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6 comentarios:

Bibiana Poveda dijo...

En el aire caliente de tus signos
permanecen pulgares hilando los teclados,
una red de palabras tan humanas
que tiñen emociones y adjetivos;

allá donde tu cuerpo se asienta con la tierra
ya crecen por sí solas las letras.

Bello homenaje, Alonso, para una grande. Acompaño en esta tristeza.
Un abrazo.

Alejandra Menassa dijo...

Me encanta Alonso, es bello, como la belleza de lo mortal, de lo perecedero.
Un beso, hermoso y sentido homenaje

Mónica Angelino dijo...

Realmente es bello, pleno de imágenes felices transpirando tristeza. Los dos últimos versos son tu mejor ofrenda.

Leni dijo...

Bellísimo Alonso.
Lleno de sentimiento.
Le preguntas a ella...
Creo que ella ya comenzó a respondeerte en el poem.


Beso

Laura Gómez Recas dijo...

"allá donde tu cuerpo se asienta con la tierra,
tus letras por sí solas se acrecientan."
Alonso, estos dos versos lo dicen todo. A veces, la poesía duele y este poema es de los que duelen.

Laura

Alonso de Molina dijo...

gracias por estar, amigos, amigas

deciros, que este texto dedicado a Blanca, formará parte de mi trabajo "La memoria
fragmentada" publicado por la Editorial Alaire en 2008 y
que estoy revisando y ampliado para una próxima edición. Es un texto, como todos los que conforman "La memoria
fragmentada" que nunca hubiera deseado escribir.


un fuerte abrazo