
La hora
Viene del tiempo la justicia,
silencio afilado en esmeril de diamante,
látigos de luz que iluminan recuerdos,
eléctricas visiones neuronales de un cariño mutilado.
¿Qué será de ti cuando abras los ojos?
Cuando tu piel sobre,
sobre la carne y los huesos.
He vivido tu ausencia con excesos de cinismo
cantando rancheras lacrimógenas en cantinas modernas
y he tomado tragos de lágrimas y gritos disfrazados,
me he cansado, aburrido, dormido sobre la mesa en que escribo
y me pregunto,
después de este exorcismo,
¿Qué será de ti cuando no importes?
Viene del tiempo la justicia
y las palabras que quieres escuchar no suenan igual en otra boca,
el tiempo ha dicho la hora, y ya es tarde.
Viene del tiempo la justicia,
silencio afilado en esmeril de diamante,
látigos de luz que iluminan recuerdos,
eléctricas visiones neuronales de un cariño mutilado.
¿Qué será de ti cuando abras los ojos?
Cuando tu piel sobre,
sobre la carne y los huesos.
He vivido tu ausencia con excesos de cinismo
cantando rancheras lacrimógenas en cantinas modernas
y he tomado tragos de lágrimas y gritos disfrazados,
me he cansado, aburrido, dormido sobre la mesa en que escribo
y me pregunto,
después de este exorcismo,
¿Qué será de ti cuando no importes?
Viene del tiempo la justicia
y las palabras que quieres escuchar no suenan igual en otra boca,
el tiempo ha dicho la hora, y ya es tarde.
2 comentarios:
Jorge, profundos versos, que invitan por sí solos, a ser leídos.
Un abrazo
desoladas las letras Jorge,
suenan a olvido
un fuerte abrazo compañero
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